miércoles, 16 de febrero de 2011

Y un día dejas de hacerlo.

Puedes dejar de hacer muchas cosas
Dejar de cantar, dejar de leer libros de cuentos, dejar de usar guantes,
dejar de ponerte esa vieja camiseta que tanto te gustaba, dejar de abrir un cajón, dejar de abrazar a un peluche, dejar de tomar decisiones importantes, dejar de usar auriculares, dejar de guardar dinero en un bote, dejar de conspirar, dejar de ser cruel, dejar de usar bolsos grandes, dejar de enviar mensajes, dejar de tocar un instrumento, dejar de usar internet, dejar de llevarte almuerzo al colegio, dejar de tachar
los días del calendario, dejar de acariciar al perro, dejar de ver fotos, dejar de cerrar la puerta antes de encender la luz, dejar de priorizar algunas cosas, dejar de fumar, dejar de beber, dejar de hacer deporte, dejar de ponerte el despertador, dejar de guardar el portátil en su funda, dejar de guardar los recuerdos de los viajes, dejar de darte golpes con el cabecero de la cama, dejar de gustar, dejar de ponerte gafas de sol, dejar de llevar una pulsera.
Dejar de escribir.

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